En el presente blog puede leer poemas selectos, extraídos de la Antología Mundial de Poesía que publica Arte Poética- Rostros y versos, Fundada por André Cruchaga. También puede leer reseñas, ensayos, entrevistas, teatro. Puede ingresar, para ampliar su lectura a ARTE POÉTICA-ROSTROS Y VERSOS.



martes, 31 de agosto de 2010

TREINTA Y TRES LATIDOS-MARIANELA PUEBLA

Marianela Puebla, Chile


TREINTA Y TRES LATIDOS





Treinta y tres latidos desde el fondo del socavón
esperanzados del prodigio que los vuelva a la vida.
El útero de la roca cobija entre sus oscuros espacios
a treinta y tres corazones que laten, mandan misivas
plenas de certidumbre de ser rescatados.
Gea les permite unirse a la superficie por el único eslabón
del hilo umbilical.
Se alimentan, planean, hablan y se aquietan.
Un nacimiento que se presume será después de tres largos meses,
si los vaticinios de los “médicos” de las profundidades son correctos.

Treinta y tres patriotas atrapados en el fondo de la incomprensión
por la indiferencia de autoridades y ambiciosas compañías
que usufructúan el pan de Chile.
¿Hasta cuándo?, ¿hasta cuándo?
¿Hay que esperar a que nos cubramos de sangre obrera?
¿A que las inclemencias del tiempo sacudan,
y acometan contra los desvalidos de siempre,
para que unos se abaniquen con las encuestas públicas
que suben y bajan el puntaje?

¿Hay que esperar que el cielo y la tierra protesten por el maltrato
y que el hombre humilde, sea para los ambiciosos del poder,
sólo un motivo de explotación y regocijo para sus bolsillos,
y que unas hipócritas lágrimas se derramen
cuando la cobardía les brota de las manos?

Treinta y tres luces que esperan desde el fondo de la incapacidad
de los gobiernos, del despilfarro y condescendencia hacia los poderosos.
Treinta y tres hombres forjados del mejor material que tiene la patria,
que esperan ser rescatados de la oscuridad y poner fin a la pesadilla.
Pero esta angustia tiene siglos, no es de hoy.
Accidentes han pasado a lo largo de la historia,
sin solución para el minero que baja por el sustento de su familia,
incluyendo este año de celebración bicentenaria.

¿Qué celebramos ahora?
¿Que Chile esté lleno de apellidos extranjeros rimbombantes?
¿Que las riquezas del pueblo colmen los bancos no chilenos?
¿Que las materias primas salgan impunemente del suelo patrio
sin restricciones ni impuestos, para satisfacción de los pocos?
¿Cuántos derrumbes más se deben padecer
para que los gobiernos asuman el papel encomendado
por las confiadas e inocentes masas que los apoyaron en las urnas?
¿Cuántos mineros y mapuches en huelga de hambre deben morir
para que Chile despierte del colonialismo exterior?

¿Qué celebramos ahora?
¿Pegarnos en el pecho, esperar el milagro,
y agradecer a los “dueños” de Chile su descuido?
Porque Chile vive esperanzado en los milagros:
Milagro que no se lleven todo el cobre.
Milagro que no nos quiten nuestras ancestrales tierras.
Milagro que no suba el pan
y que nos den un mísero aumento, en los sueldos de hambre.
Milagro que las autoridades no hagan borrón y cuenta nueva con los asesinos.
Milagro que la educación no pase a manos privadas.
Milagro que la salud cubra la pobreza del pueblo.
Milagro que la minería sea patrimonio de los chilenos.
Milagro que las nuevas termoeléctricas no contaminen el territorio.
Milagro que no suceda otra desgracia en la mina,
buen motivo para aumentar el ranking gubernamental, la foto,
el regalo, las dulces palabras,
la demagogia bonita del discurso hacia la gente en pena, el día de hoy,
¿y mañana, volveremos a lo mismo?

Eso, por ahora,
allí están los treinta y tres paladines a punto de renacer
desde las entrañas piadosas de la tierra.
¿Será la última vez que sucedan estas desgracias?
No lo sabemos, sólo, si las autoridades no dan vuelta a la página
después de que emerjan estos treinta y tres compatriotas
desde el fondo de la incomprensión y el olvido.

Desde el fondo de una criminal e imperdonable indiferencia…

2 comentarios:

Ligia&José&Rocio dijo...

me agrada haber encontrado este blog... gracias por compartir un pedacito de tu ser.

saludos!!!

André Cruchaga dijo...

Se le agradece su visita y su comentario. Siga que esta es su casa.

AC
Administrador del blog