En el presente blog puede leer poemas selectos, extraídos de la Antología Mundial de Poesía que publica Arte Poética- Rostros y versos, Fundada por André Cruchaga. También puede leer reseñas, ensayos, entrevistas, teatro. Puede ingresar, para ampliar su lectura a ARTE POÉTICA-ROSTROS Y VERSOS.



domingo, 10 de septiembre de 2023

ALFONSO VELIS TOBAR Y SU DEVOCIÓN POR LA LITERATURA SALVADOREÑA

 




ALFONSO VELIS TOBAR

Y SU DEVOCIÓN POR LA LITERATURA SALVADOREÑA

 

 

Por Grego Pineda*

 

 

Con gratitud recibí un ejemplar del libro “Contribución a la historiografía literaria salvadoreña en Centroamérica y hacia una Historia posible”, del autor Alfonso Velis Tobar. El obsequio vino desde Canadá, patria adoptiva del Magíster en Arte, poeta, escritor e investigador académico, quien desde 1986, fecha en que se graduó de literatura en la Universidad de El Salvador, ha dedicado las mejores horas de su vida creativa y productiva a cultivar y hacer prosperar el conocimiento y desarrollo de la literatura de El Salvador, su tierra amada.

He aprendido mucho en sus 245 páginas. Su lectura es interesante e inquietante: se advierte un compromiso personal del escritor con crear conciencia en quien lo lea, sobre el potencial de la literatura conocida de El Salvador y la que él ha rescatado y redescubierto en su afanosa investigación orientada a crear una historia literaria salvadoreña en Centroamérica, empeño meritorio pues es el primero en tal sentido y alcance.

Podría decir que el libro está orientado a literatos, historiadores e intelectuales en general, por la gama de información y el esquema expositivo decantado por el academicismo, pero reconozco, también, un esfuerzo del escritor de “dialogar”, en sus términos, con algún lector ajeno a las disciplinas citadas. Es probable que la densidad y alcance de la investigación dificulte un poco la comunicación llana, pero esto no desmejora, sino, lo hace curioso y justifica las libertades coloquiales esparcidas por el texto.

Velis Tobar, entre otras muchas conclusiones de respeto y reflexión, sentencia: «los factores de violencia social, económicos, políticos, culturales y hasta religiosos, [son] los que han condicionado la literatura salvadoreña en Centroamérica» y utiliza un espacio significativo para documentar y fundamentar su conclusión. El libro es ambicioso en su alcance y es un material válido para otros investigadores que, tomándolo como base, puedan precisar y fortalecer las valoraciones del autor que se enfoca en la literatura salvadoreña y luego a ésta en Centroamérica e incluso en Latinoamérica.

El libro es un recuento, valoración y contextualización de lo publicado hasta hoy en El Salvador, pero también hunde sus raíces a textos perdidos en el tiempo y aún más, sus búsquedas en el extranjero de lo publicado sobre la literatura salvadoreña. Durante mi lectura no pude dejar de pensar en la obra titánica que se había impuesto Velis Tobar y en los escollos y desafíos que tuvo que enfrentar: esto mantuvo viva la llama de mi interés.

Alfonso Velis Tobar vive en Canadá, exilio motivado por los azares y peligros que enfrentó durante la guerra civil de El Salvador por ejercer el peligroso ejercicio de pensar, ser Poeta y publicar sus propuestas estéticas que, obviamente, estaban entretejidas con las exigencias políticas-sociales y económicas del momento. Y hay abundante obra publicada de esa época. Poesía, por cierto, rica en humanismo y compromiso.

Pero su poesía, ajena a sus búsquedas académicas, nos devela y revela al Velis Tobar que hay que reconocer, disfrutar, sentir y pensar junto a sus versos. Su poesía no exige ni necesita leerse entre líneas, es frontal, directa pero sus matices metafóricos hacen que su franqueza y propuesta se presente abrazada armónicamente por el buen decir. La poética de Alfonso merece un artículo aparte.

El investigador Alfonso Velis Tobar se ha disciplinado para mirar el conjunto de lo literario salvadoreño y tomar distancia analítica, reflexiva y por eso dice: «Quiero reconocer el surgimiento de una crítica académica universitaria de extranjeros y de otros salvadoreños de posguerra, que están escribiendo literatura centroamericana o salvadoreña en EEUU, Canadá y Europa; o bien fungen como profesores en universidades». Esto abre una veta de investigación para incorporar la literatura de la Diáspora salvadoreña en Los Estados Unidos de América, tan rica pero ignorada en el diario vivir salvadoreño.

La trayectoria intelectual, académica y creativa de Alfonso Velis Tobar es admirable porque ha sido constante y de crecimiento. Nació en Apaneca, Departamento de Ahuachapán, El Salvador, en 1949, su obra publicada es profusa y variada, incursionando en todos los ámbitos afines a la literatura y que inquietaban o satisfacían su devoción. Yo, ahora, expreso mi gratitud a Alfonso, por su aporte significativo y valioso y, como dije, que su obra sea inspiración para esta generación y las que vienen. Velis Tobar ha hecho camino en su andar.

 

*Magister en Literatura Hispanoamericana de la Pontificia Universidad Católica del Perú.

 


lunes, 4 de septiembre de 2023

Carlos Javier Jarquín: naturaleza en plural canto cósmico

 



Carlos Javier Jarquín:

naturaleza en plural canto cósmico

 

Lic. Miguel Fajardo Korea

Premio La Gran Nicoya


CANTO PLANETARIO fue diseñado para alcanzar un sueño inimaginable. Este se logró gracias al apoyo de los invitados de 110 países, ¡en 77 idiomas! Cuenta con 268 participantes: 134 mujeres y 134 hombres, tanto poetas (216) como narradores (36). Intervinieron tres traductoras, dos participan a su vez como poetas. También, un artista plástico, dos diseñadores gráficos, un dibujante, un fotógrafo, un cantautor, un arreglista musical, un músico y nueve cantantes; de estos, seis interpretan el himno oficial en español. Del total de participantes 110 son hispanohablantes. En esta obra, está la ¡generación planetaria!

Este proyecto es independiente, sin nexo alguno con organismos, instituciones, empresas, ideologías o colectividades políticas, culturares, intereses económicos, concepciones sociales y creencias religiosas. Los participantes y sus aportes están al margen de cualesquiera manifestaciones de discriminación, racismo, nacionalidad, edad, sexo, orientación sexual, discapacidad, raza, etnia, idioma, nivel económico, nivel académico, entre otras entelequias humanas.


            La publicación de CANTO PLANETARIO consta de dos volúmenes. En el primero están los participantes de África, América y Oceanía. En el segundo, los de Asia y Europa. En cada volumen aparecen los datos generales de la obra, los nombres de los integrantes, sus respectivos países e idiomas presentes.
Carlos Javier Jarquín. Gestor humanista, incansable y visionario es el compilador.


            CANTO PLANETARIO nos hermana. Hermana a personas de todas partes del planeta; nos convierte en una sola familia cuya morada es un libro, una casa de dos habitaciones, de dos tomos. La concepción de esta casa, el arquitecto, ha sido el “Chico poeta”, Carlos Javier Jarquín, “quien me ha dado el privilegio de ser el constructor, a través de HC EDITORES, para levantar la casa y hacerla visible. Aquí habitamos soñadores que creemos que un mundo en paz, solidario y respetuoso de nuestros congéneres y de la Naturaleza, es posible”.

Hámer Salazar. HC Editores. Es la casa editora responsable de su publicación.

         Carlos Javier Jarquín, visionó este llamado y para ello, ante su inaudible voz en los sordos oídos del mundo, invitó a escritores, artistas y poetas de todo el planeta con la intención de unir voces, para de ese modo ser escuchados; con ellos, están representados todos los ciudadanos, quienes al igual que Jarquín están preocupados por el planeta. A juzgar por la cantidad de pensadores, artistas, soñadores, poetas, pintores y otros, que acudieron al llamado del ideólogo de este Canto Planetario, podemos concluir que existe un interés en hacer algo, y la unión de todos, de por sí, es un gran aporte. 

          Carlos Javier Jarquín es el compilador de la ANTOLOGÍA DEL BICENTENARIO DE CENTROAMÉRICA (1821-2021). México: Ayame Editorial, 2021:337 páginas.

          Este es su segundo proyecto cultural. CANTO PLANETARIO. Hermandad en la tierra. Costa Rica: Hámer Salazar HC Editores. Consta de dos volúmenes. Vol. I (618 pp.); Vol. II (612 pp.). Cada ejemplar con un valor de $22, se distribuye por Amazon. Apoye esta cruzada cultural y adquiera sus ejemplares.

 

         Guanacaste está presente en esta antología cósmica con dos de mis poemas.

 

 

NATURALEZA CONTRA FRONTERAS          MIGUEL FAJARDO

 

Arribo a las montañas

para desnudar el nombre de la sed de América.

El sol mira a los océanos que nunca duermen,

como parte del fuego en la esperanza.

Nuestro planeta ora como los pájaros

que recorren la justicia contra la maldad.

La tierra se opone a su desequilibrio

en las zonas tórridas, las llanuras o los trópicos.

Los días son girasoles, sin lugares ajenos para la paz.

El legado holístico baja por las cordilleras incas,

mayas, aztecas, toltecas, guaraníes o chibchas.

El calendario mexica marca el tiempo del maíz

como la puerta del sol en nuestros cielos.

Me bebo la naturaleza integral de Buenos Aires,

Bogotá, Santiago, San José o Managua.

El Canal de Panamá ensambla los mares Caribe y Pacífico,

donde las aguas se olvidan de las inútiles fronteras divisorias.

El malecón de Santo Domingo guarda la entrada extendida

para estrechar las manos históricas de nuestra América.

Los cinco continentes recomenzamos los años

con la alegría vegetal de cada luz en su territorio.

El medioambiente es la consigna

para salvarnos entre todos de la autodestrucción.

Cada uno será responsable de izar las banderas

del desarrollo sustentable por la vida colectiva.

 

 

UNÁNIME CANTO NATURAL                            MIGUEL FAJARDO

 

Luchamos contra los desafíos.

No habrá renuncia en nuestros sueños

por un planeta más humanizado.

La Pachamama es sed

en el viento de los bosques,

o en el océano de la infinitud.

Los relámpagos cruzan lejanías

en las llanuras contra las guerras.

El mar volverá a llamarnos

desde los territorios cósmicos del sol.

El aire es una nueva herida

en el regreso contra los cautiverios.

Una parte del universo apunta hacia la luz

en la cordillera de los límites.

El viento emerge como un horizonte abierto,

con ríos de lluvia silenciosa.

Hablan sobre el medioambiente transoceánico

en los amaneceres de todas las fronteras.

El fuego restalla frente a los celajes

de los caminos australes en verano.

Los labios del invierno pronuncian

la palabra libertad para la naturaleza,

como un canto integral y unánime,

en los relámpagos más sagrados de su hábitat.


Lic. Miguel Fajardo, poeta costarricense