Horacio Laitano, Argentina
Qué quedará después…
Qué quedará después
de cada uno,
de este diario acontecer
que sustentamos
a fuerza de palabras.
Qué quedará después
de las noches inefables
donde por un afán de eternidad
nos debatimos.
Quién hablará del viento
que sostuvo nuestros brazos
cuando aún adolescentes
nos tendimos sobre el humo.
De qué forma inusual,
acaso inadvertida,
regresaremos
al origen del olvido.
De “Memorias de la noche” (1982)
Poema IV
Quema los quemantes
los de bocas encendidas
en secretos
los entuertos prolongados
en desmayos
las valijas del aire
enrarecido
las costumbres refinadas
del perfume
la colonia y el alcohol
que retrocede.
La esquina
el sobretodo
tu vieja billetera
encajetada
tu zapato de color
bajo las ramas.
Recuerda alguna luz
que te enceguezca
y vuelve después
a tu escritorio.
(Ayer
preguntaron por tu padre.)
De “La mandrágora secreta” (1984)
La viuda alegre
Es la viuda alegre la que canta
sobre los bordes negros del vestido.
La que lleva en su canasta
la cabeza del muñeco
y las flores amarillas del delirio.
Es la viuda alegre la que sueña
entre los barcos azules del domingo.
La esponjosa viuda de los barrios
que invita a cenar a sus vecinos.
Es la viuda más alegre y la más triste
por quedarse a enviudar con su marido.
5 comentarios:
Querido Horacio: felicitaciones una vez más por tu creacción literaria!!
Y a ( a josep esteve rico sogorb, amigo de Papirolas).
Salud!!!
Norma Padra
Felicitaciones, querido Horacio. Es un gusto leerte y saber que tus versos viajan por distintos espacios.
Gracias André, por compartir los poemas de Horacio.
Un saludo cordial
Analía
Querido Horacio,
comparto con alegría la publicación de tus poemas en este interesante blog de André Cruchaga.
Tus versos, imbuidos de ingentes significaciones, apuntan a su vez, a la conciencia y al corazón del lector y permanecen en él. Felicitaciones a vos y al autor del blog.
Cariños
Elisa Dejistani
Querido Horacio:
tu poesía, que va desde lo hondamente metafísico del primer poema a la alegría de la viuda, tan "esponjosa", pasa por el misterio del segundo poema, donde emerge el hemisferio derecho con libertad, en un fluir lírico donde la locura se confunde con el dolor y la fuerza positiva de vivir.
Felicitaciones por tu publicación en este blog, que me merece el mayor respeto. Con cariño Irene Marks
Gracias, por el comentario al poeta Horacio.
André Cruchaga
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