Rosa Iglesias, España
TRAVESÍA
Oh...alborozo de la noche postergada,
simbología metafísica y soñadora de mis días
Háblame, soliviantada, de tus ínfulas de luz,
de tus carencias y tus bienes ,
de tus mantras y su armonía
Oh Paraíso excelso de mi ocaso sin memoria,
pasadizo conventual donde mora mi agonia...
me recibes, como cruz ,
matizándome los labios con tus versos,
emigrando de tu nido, a mi boca sin aliento,
los desubicados goznes de las puertas del ayer,
de aquellas que cerraron sus cerrojos
a nuestros parapléjicos acentos
Diacríticamente irrelevantes,
emblemáticos y surrealistas, los conceptos,
se desglosan como pneumas y letargias,
como ilustraciones ensoñadas y divinas
como belladona, camomila y malvasía,
edulcurándome con sutras
de éxtasis y magia
Alimentándome de ti,
enamorándome a escondidas,
voy,
oh belleza solitaria y paradigma,
derramándome hacia ti,
porque te has entregado a mi servicio,
aunque siga siendo , francamente,
un austero ser indigno
Y por tanto, yazco ahora
en abandono, y en tus brazos maternales,
para enlazarnos sepultando los silencios,
para que me adormezcas con tus nanas liberales,
para que, con tus heterodoxias mudas y cantábiles,
me vayas ungiendo con azúcares y besos,
con mitologías sacras y caricias siderales
Ya no me procures, noche oscura y mixta ,
la mitad de tu sombra blanca, porque allí padezco,
con las entreveradas y amargadas medias tintas
Díctame, pues, desde tu morada y matriarcado,
suavemente, inspiraciones ,
órbitas, inmaculadas, contemplaciones
y literaturas cadenciales de místicos deseos
Eres, tú, la soberana capitular,
la sacerdotisa, la reina, y maga,
de las enigmáticas constelaciones
Y ante las impolutas y despejadas ecuaciones,
procrearemos nuevamente sinfonías,
nunca turbias, nunca nunca, tibias,
sanadora y fiel amante, que te me has sembrado,
como oasis,
en el desierto y en el huerto de mi vida,
como fuente, surtidora, y manantial,
en el inconsciente mar de mi agua limpia
Contrariando servilismos, futilidades, controversias,
dualismos, necedades, separatismos todos y soberbias,
vayamos, tú y yo, sobrevolándolas solas, hermana,
tú y yo siempre,
tú y yo, tú , siempre conmigo, palabra,
contra aquellas falsedades de insufribles apariencias.
Y es , en este peregrinar ligero
de inconcrecciones misteriosas sin regreso,
que incubamos narraciones literarias, bajo el ala,
para daros fe de sus salmodias,
de sus musas y plegarias
Solamente, a decepciones, nos tildaron de promiscuas
nos llamaron y apodaron , tristemente, " mala vida",
y atravesando ilustradas sedaciones,
solidarias con la paz, en sosiego y sintonía
cosechamos madreselvas y placeres,
turquenitas, mazapanes y delicias
Son, de aquellos, los corsarios belicosos
y sus bastos devaneos ,
las soliloquiales luces,y los tenues contoneos ,
son, venturosamente, los nuestros
( aleatorias fauces suyas,
que devastaron,
las plurivalentes fantasías tuyas)
En contra de la tan desorientada y suelta pluma,
diluída , acuosamente ilustre y fidedigna,
seré leal a la santísima luz sacrificada del verbo
aunque retornaré arrostrada,
por entre las atronadoras, pero secretas letanías,
que humildemente, hoy, os muestro
Y es que, por la angosta y pertrechada senda
de los enrarecidos y sabios alfabetos
que ahora transitas,
también anduve, sordamuda, ciega y aturdida ,
arrastrando esta voz insuficiente
por la cenagosa travesía...
EREMITA EN NAUFRAGIO
Soy piedra abnegada
pero desunida al entramado del suelo
Sustancia mineral con dignidades anónimas
y sustratos libertarios de condición diamantina
Canto rodado indúctil
que navegando en su riachuelo aburrido
se hartó de besar, entre soledades hambrientas,
la aguda necrosis de una herrumbrosa montaña
Siempre celosamente a escondidas,
siempre disconforme, cómplicemente atendida
por aquella amargura salada
del sabor a subsuelo, a llovizna,
a llanto caído y a tierra
Sumisión excesivamete indecisa
para ir escalando escarpadas
de fosilizadas laderas
y por tanto como deseare alcanzarla
en su embargadura asombrosa y serena,
sobrevolarle arriesgada
la acantilada y peligrosa cornisa
Eremita en naufragio me llaman
y sin cronología determinada, amanezco,
para renombrarme, desolación arraigada,
como rosa mística que, olvidada,
fuere arrancada del rosal
drásticamente en silencio
Al pie de algún inmortal sedimento
transito llorando sobre mi huella anegada,
sin pretensiones, persecuciones, ni prisas
pues debo cumplir, con esta pobreza adquirida.
las tasas inadecuadas, mas no sufragadas,
por una insobornable sonrisa
Aliada informal a la comunidad libertaria y sin tregua,
fui de carcelación en carcelación injustamente agredida
y me regresé , desde la más pura y sutil transparencia,
cándidamente indefensa pero sin darme jamás, por vencida
Hoy me sublevo intimista, solitariamente intacta,
contra una propiedad insular en secuestro
y, con una máxima locuaz como mínima hazaña,
mentalmente, me insubordino y, me crezco
Asumción resolutiva y contraria
al místico ideal que desde siempre adolezco
y al que renuncio para nunca ser desahuciada,
como porción individual o como fracción indivisa
de una peninsula hiératica, amargada,
colonizada y vacía
Proclamo mi nueva condición
de istmo solitario en barbecho,
de pasadizo secreto y de puente
Y caminando solaz
hacia el vacío de la nada, me adentro,
de la mano fiel y considerada
de algún inconstante sideral viento
por el que, asumiéndome y sin discrepancias,
mágicamente, comprendo
AGONIZANDO LA VOZ
Se han ...ido
Las hojas verdes de la primavera
con su alegría más inocente...y más natural
...se han ido
¿ Cómo esperar a que renazcan de nuevo
si ya no me quedan más hojas
en el árbol otoñal del que escribo ?
Aletean rotas
las esperanzas aún aniñadas de ser liberales,
las ilusiones de ser escritores, pancartistas o placebos,
las insinuadas verdades que se están devolviendo
capullo acorazado de broza,
crisálida de hieles amargadas ende úteros
ahuecados, vacíos y hueros
Oh... la falsedad sectarizada en un bosque talado
pudriéndose medio verdad entre corazones y letras
Oh la divinidad de la palabra sencilla a oscuras, indefensa,
medio borrada
para no llegar a ser falazmente, del todo, cristicamente aniquilada
No me cabrán los manojos enamorados de verbos,
ni las docenas amalgamadas de plumas segadas
en la maldita y reverberada lengua clausurada trapense en secuestro
Y ya no tendré más oportunidad de revolverme a llorar en silencio
ni de agredirme vocablo, sin nombre, solidarizado
y sin huella derrochándose luz entre trasiegos y trochas
Ya no seré nunca más al trasluz
parte mortecina de aquel clandestino y solapado poema
Ya no renaceré huérfana
ni mater, madrastra et magistra
pariendo versos y soliloquios estériles
Ya no seré el próximo capítulo final
de la literatura más desilusionada y marchita,
solemnemente exagerada y mediocre
porque ya soy, hoy, y me agonizo poeta sin poesía
y me acontezco sembrada entre páginas llovidas
de olvido fragante sin fruto, fertilizante sangrado y mudez,
contra la incipiente y maltratada... rediviva semilla