Fotografía: André Cruchaga
Destino sin Patria
Árbol fiel de la verdad
frente a la noche,…
Emilio Prados
Se rompió la geografía en lágrimas.
En medio del Universo,
El planeta del hambre se desplaza
Con barrotes, neblina, sombras y pavor.
En la escuela me enseñaron que la Patria,
Era un río cristalino,
Un sendero de anhelos,
Un recodo de apacibles montañas;
Pero no me explicaron los miedos,
El abismo, el suspiro agonizante del crepúsculo,
Las espinas del libre mercado.
La esperanza siempre ha sido un cuerpo sin alma.
Tantas décadas de respirar la miseria,
La publicidad siniestra, la muerte
Y la vida como rompeolas, huesos de memoria,
Sobre el huracán de la sangre.
Cada día cruzamos un laberinto de banderas transnacionales,
La noche llorando brazos salados,
La ficción atrás de paredes ciegas,
Candelabros piadosos en la calle, disfrazados de ternura,
Carne de cementerio en el patio de las ventanas
Y en los aleros, las almas colgando
Junto al santo, sus predicados existenciales.
No me hablaron de la trágica tempestad del grito.
No me hablaron de las vísceras en la memoria,
No me hablaron de la gramática cósmica del jade,
Ni de los íntimos, verdes mares del nauta.
Me hablaron de indulgentes espectros con cabellera de sol,
No de la catástrofe de los espejos,
No del cortejo informe de la ceniza.
Me hablaron de hombres zarcos,
No del dolor cobrizo de los esclavos,
No de las ojeras al pie del estío.
Un vaho de urracas representa la voz.
El lobo acecha, rumorean las pestañas y los dientes.
Mis mayores, todavía levan sus túnicas
De azules albahacas y albas de copal,
Por donde los espejos de la luna
Ponen su ojo de águila o serpiente.
Pese a la deshora del reloj descompuesto,
Todavía me siguen diciendo
Que la Patria es una luna de flautas,
Cuando sabemos,
Que alguien puede matarte en la puerta de tu casa
Y seguir el hilo de la calle
Con la impunidad menesterosa de la justicia…
Hoy la violencia ha elevado su pulso a ser Dios:
Sepulcrales son los ojos frente al candil de la Patria;
Llagas venéreas los crepúsculos,
Nube de tizne el umbral a la vida,
Áspero el nido y macabro el Paraíso…
Barataria, 29.04.2007.
Destino sin Patria
Árbol fiel de la verdad
frente a la noche,…
Emilio Prados
Se rompió la geografía en lágrimas.
En medio del Universo,
El planeta del hambre se desplaza
Con barrotes, neblina, sombras y pavor.
En la escuela me enseñaron que la Patria,
Era un río cristalino,
Un sendero de anhelos,
Un recodo de apacibles montañas;
Pero no me explicaron los miedos,
El abismo, el suspiro agonizante del crepúsculo,
Las espinas del libre mercado.
La esperanza siempre ha sido un cuerpo sin alma.
Tantas décadas de respirar la miseria,
La publicidad siniestra, la muerte
Y la vida como rompeolas, huesos de memoria,
Sobre el huracán de la sangre.
Cada día cruzamos un laberinto de banderas transnacionales,
La noche llorando brazos salados,
La ficción atrás de paredes ciegas,
Candelabros piadosos en la calle, disfrazados de ternura,
Carne de cementerio en el patio de las ventanas
Y en los aleros, las almas colgando
Junto al santo, sus predicados existenciales.
No me hablaron de la trágica tempestad del grito.
No me hablaron de las vísceras en la memoria,
No me hablaron de la gramática cósmica del jade,
Ni de los íntimos, verdes mares del nauta.
Me hablaron de indulgentes espectros con cabellera de sol,
No de la catástrofe de los espejos,
No del cortejo informe de la ceniza.
Me hablaron de hombres zarcos,
No del dolor cobrizo de los esclavos,
No de las ojeras al pie del estío.
Un vaho de urracas representa la voz.
El lobo acecha, rumorean las pestañas y los dientes.
Mis mayores, todavía levan sus túnicas
De azules albahacas y albas de copal,
Por donde los espejos de la luna
Ponen su ojo de águila o serpiente.
Pese a la deshora del reloj descompuesto,
Todavía me siguen diciendo
Que la Patria es una luna de flautas,
Cuando sabemos,
Que alguien puede matarte en la puerta de tu casa
Y seguir el hilo de la calle
Con la impunidad menesterosa de la justicia…
Hoy la violencia ha elevado su pulso a ser Dios:
Sepulcrales son los ojos frente al candil de la Patria;
Llagas venéreas los crepúsculos,
Nube de tizne el umbral a la vida,
Áspero el nido y macabro el Paraíso…
Barataria, 29.04.2007.
Ver más en: www.artepoetica.net
Interesante.
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