En el presente blog puede leer poemas selectos, extraídos de la Antología Mundial de Poesía que publica Arte Poética- Rostros y versos, Fundada por André Cruchaga. También puede leer reseñas, ensayos, entrevistas, teatro. Puede ingresar, para ampliar su lectura a ARTE POÉTICA-ROSTROS Y VERSOS.



martes, 31 de agosto de 2010

TREINTA Y TRES LATIDOS-MARIANELA PUEBLA

Marianela Puebla, Chile


TREINTA Y TRES LATIDOS





Treinta y tres latidos desde el fondo del socavón
esperanzados del prodigio que los vuelva a la vida.
El útero de la roca cobija entre sus oscuros espacios
a treinta y tres corazones que laten, mandan misivas
plenas de certidumbre de ser rescatados.
Gea les permite unirse a la superficie por el único eslabón
del hilo umbilical.
Se alimentan, planean, hablan y se aquietan.
Un nacimiento que se presume será después de tres largos meses,
si los vaticinios de los “médicos” de las profundidades son correctos.

Treinta y tres patriotas atrapados en el fondo de la incomprensión
por la indiferencia de autoridades y ambiciosas compañías
que usufructúan el pan de Chile.
¿Hasta cuándo?, ¿hasta cuándo?
¿Hay que esperar a que nos cubramos de sangre obrera?
¿A que las inclemencias del tiempo sacudan,
y acometan contra los desvalidos de siempre,
para que unos se abaniquen con las encuestas públicas
que suben y bajan el puntaje?

¿Hay que esperar que el cielo y la tierra protesten por el maltrato
y que el hombre humilde, sea para los ambiciosos del poder,
sólo un motivo de explotación y regocijo para sus bolsillos,
y que unas hipócritas lágrimas se derramen
cuando la cobardía les brota de las manos?

Treinta y tres luces que esperan desde el fondo de la incapacidad
de los gobiernos, del despilfarro y condescendencia hacia los poderosos.
Treinta y tres hombres forjados del mejor material que tiene la patria,
que esperan ser rescatados de la oscuridad y poner fin a la pesadilla.
Pero esta angustia tiene siglos, no es de hoy.
Accidentes han pasado a lo largo de la historia,
sin solución para el minero que baja por el sustento de su familia,
incluyendo este año de celebración bicentenaria.

¿Qué celebramos ahora?
¿Que Chile esté lleno de apellidos extranjeros rimbombantes?
¿Que las riquezas del pueblo colmen los bancos no chilenos?
¿Que las materias primas salgan impunemente del suelo patrio
sin restricciones ni impuestos, para satisfacción de los pocos?
¿Cuántos derrumbes más se deben padecer
para que los gobiernos asuman el papel encomendado
por las confiadas e inocentes masas que los apoyaron en las urnas?
¿Cuántos mineros y mapuches en huelga de hambre deben morir
para que Chile despierte del colonialismo exterior?

¿Qué celebramos ahora?
¿Pegarnos en el pecho, esperar el milagro,
y agradecer a los “dueños” de Chile su descuido?
Porque Chile vive esperanzado en los milagros:
Milagro que no se lleven todo el cobre.
Milagro que no nos quiten nuestras ancestrales tierras.
Milagro que no suba el pan
y que nos den un mísero aumento, en los sueldos de hambre.
Milagro que las autoridades no hagan borrón y cuenta nueva con los asesinos.
Milagro que la educación no pase a manos privadas.
Milagro que la salud cubra la pobreza del pueblo.
Milagro que la minería sea patrimonio de los chilenos.
Milagro que las nuevas termoeléctricas no contaminen el territorio.
Milagro que no suceda otra desgracia en la mina,
buen motivo para aumentar el ranking gubernamental, la foto,
el regalo, las dulces palabras,
la demagogia bonita del discurso hacia la gente en pena, el día de hoy,
¿y mañana, volveremos a lo mismo?

Eso, por ahora,
allí están los treinta y tres paladines a punto de renacer
desde las entrañas piadosas de la tierra.
¿Será la última vez que sucedan estas desgracias?
No lo sabemos, sólo, si las autoridades no dan vuelta a la página
después de que emerjan estos treinta y tres compatriotas
desde el fondo de la incomprensión y el olvido.

Desde el fondo de una criminal e imperdonable indiferencia…

domingo, 29 de agosto de 2010

Manifiesto para la historia o Dios ha declarado la guerra

Yván Silén, Puerto Rico








MANIFIESTO PARA LA HISTORIA O DIOS HA DECLARADO LA GUERRA








Destruir el lenguaje para alcanzar
la vida es crear.
Antonín Artaud

Nos urge crear en la realidad la
poesía de las sombras luminosas.
Oskar Azevedo

Mi poesía. . .tal, una loca de pudor.
José Martí




Maldigo el lenguaje de los trasnochados y de los nostálgicos de una soberanía pospuesta. ¡La demokracia ha fracasado!

Cuando nos enfrentamos a la Universidad de Puerto Rico, esa universidad de la copia yanqui, nos enfrentamos a un conflicto esencial con nosotros mismos que Antonín Artaud llamó la “infección de lo humano”.[1] La universidad es el síntoma de la infección del país. Al no podernos liberar de este virus político del espíritu y del “arte”, y al convertir a este virus en la “política del no-saber”, atentamos demokráticamente contra las posibilidades políticas del ser que somos. La administración promueve la mediocridad, la no-praxis, el paternalismo, el “ay, bendito”, lo-Pasífae, y nos convertimos en el cuasi-homo que corroe con la inmovilidad lo sagrado mismo. Castramos el sueño y nos desorfeamos: asesinamos colectivamente la posibilidad de ser Orfeo. Sentimos vergüenza de Orfeo (Che Meléndes)[2] y nos convertimos en los cómplices y en los colaboradores “stalinistas” de los invasores (1898-2010), porque hemos preferido ser melones, ser culturales, ser postmoderna y claridadmente los asalariados anexionistas del “arte”.

Nosotros, los mismos diferentes (la contradicción de la contradicción, la paradoja, el metayinyan, los metacronopios, la metainquisición), nos hallamos frente a un gobierno, el del anexionismo que quiere destruir a la universidad y que atenta burocráticamente contra ésta (el sueño contra la posibilidad--la náusea contra el vértigo--), y ha intentando expulsar a sus “profesores por contrato”, ha intentado censurarlos, abandonarlos y desaparecerlos. Un gobierno cabrón que pretende reducir a la miseria a “sus” PH.D., a “sus” intelectuales, y a “sus” escritores es un gobierno diabólico y antiCristo. Un gobierno que promueve la prostitución de la poesía y de sus “poetas” es un gobierno apocalíptico y bugarrón. Un gobierno que se mercantiliza y que pretende convertir a la realidad en la frivolidad de las hetairas del crimen, TIENE que ser sepultado.

Desde el 2005, cuando regresé a Puerto Rico (al Hades--a Itaca--) rechazando todas las posibilidades del “full-time” que la Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY) me ofrecía, y pese a lo precario de mi situación económica, comencé o reanudé (1972--2010--) la praxis de la guerra cultural que pudiera corregir la confusión universitaria, la confusión poética del nihilismo y la confusión de la nación consigo misma.[3] Aun así, la infección prosigue panzistamente, y como complejo de inferioridad, delante de nosotros. Desde el 2001 para acá he publicado voluntariosamente los siguientes libros: Casandra & Yocasta (2001);[4] La muerte de mamá (2004);[5] Los poemas de Filí-Melé (2009--edición de Córdova Iturregui--);[6] La novela de Jesús (2009),[7] Francisco Matos Paoli o la angustia de Dios (2009),[8] Cátulo o la infamia de Roma (2010),[9] y la entrevista que me hiciera el escritor dominicano Rey Andújar: “Yván Silén entre la libertá y la demokracia” (2010).[10]

Este año publicaré también, con la editorial Tiempo Nuevo, La poesía piensa y, posiblemente, la antología sobre Alejandro Tapia y Rivera, junto al profesor Félix Córdova Iturregui. Pese a todo esto, se me expulsa o se intenta dejar cesante guadalupanamente. Pero mi Minotauro (mi poeta médium, espiritista, budista, metacristiano y terrorista) puede ser más que sus burócratas, que sus gángsters y que los agentes-matones del FBI. Ellos han comenzado a comprender que soy un escándalo y que soy también, pese al ghetto en donde ellos viven espiritualmente, “poeta del mundo”. Para expulsarme tendrían que terminar por detenerme, o tendrían que culminar con mi asesinato. Pero como ha dicho Gandhi: la cárcel puede ser una experiencia espiritual. En esta confusión, en este trajín, Estudios Hispánicos, Estudios Generales y Literatura Comparada se han convertido en la casa baldía (Los soles truncos) en donde no se quiso pelear para defender la patria innombrada.

Pero lo grave de todo esto es que se haya utilizado mi nombre, mi “buena” o mala fama, para llenar dichos cursos y luego dárselos o otros profesores y a ese cúmulo de “profesores” anexionistas, muñocistas, independentistas y “retirados” que jamás llenan sus cursos. ¡ESTO ES INMORAL!

Guadalupe,[11] todos los guadalupanos y todos los anexionistas, están forzados históricamente a irse. Porque el proyecto de la falta cultural (de su destrucción--la Editorial Universitaria, el Instituto de Cultura, la Escuela de Arte, la Escuela de Música--) que ellos realizan atenta contra la nación misma. Ella, como Ygrí Rivera, es el ente que realiza bubónicamente el trabajo sucio de los invasores. Porque el matriarcado de estas mujeres, como el patriarcado del muñocismo seudo demokrático, también tendrá fin. Desde 1990 vengo anunciando lo que hoy “anuncian” algunos “politólogos”: la caída de la colonia.

Los ángeles armados de 1972 todavía prosiguen armados.[12] Ante esta continuidad hay que plantear la consigna de la resistencia: ¡No se rinda nadie! Pero Guadalupe (como Fortuño, como Rodríguez Emma, como de la Torre--como el Secretario de Educación--) es y prosigue siendo la silueta pestífera y putrefacta de una historia que sólo huele a polilla. José Martí es inevitable: “La Muerte está sentada / a mis umbrales. . .quien va a morir, va muerto”.[13]



Yván Silén
29 de octubre del 2010
Universidad de Puerto Rico
______________

[1] Véase El teatro y su doble.
[2] Véase La casa de las formas.
[3] Véase La poesía piensa.
[4] Publicado por el Instituto de Cultura Puertorriqueño.
[5] Publicado por el Instituto de Cultura Puertorriqueña.
[6] Publicado por la editorial Huracán.
[7] Publicada por la editorial Tiempo Nuevo.
[8] Publicado por la editorial de la Universidad de Puerto Rico.
[9] Publicado por la editorial Terranova.
[10] Esta entrevista fue censura por el periódico Claridad. Del 2008 para acá este periódico no ha publicado nueve trabajos míos; el periódico El Nuevo Día, como el periódico Diálogo de la UPR, nunca han publicado ningún trabajo mío. ¡La demokracia es la ideología del espanto! ¿Quién ha dicho clichosamente que las ideologías han muerto? Los postmoderno se denigran.
[11] Las personas como Guadalupe, o como las que he mencionado en este “manifiesto”, nos interrumpen. Intentan no dejarnos competir con nosotros mismos. Hay que descubrir la ira de la fe. La ira de Dios que nos contamina “ateamente”. La interrupción es una grieta por donde Dios se cuela racionalmente. “¡Piénsame!”--dice Dios. Pero sé más radical: “¡FÚMAME!” La metafísica “indecorosa” del poeta es extravagante. Metafisicarse es entrar, pues, a la ebriedad de los niños. ¿Niños borrachos? ¡Esa es la pasión de la vida! Los sueños se han enamorado del poeta. Pero la guerra también es inevitable.
[12] ¿La peste muñocista de 1972 que denunció El pájaro loco es la misma peste anexionista de todo Puerto Rico? Obviamente, no. El abismo es más profundo, porque muchos independentistas se han entregado, se han acomodado o se han callado. ¿Cuántos textos light ha producido esta “última” crisis? ¿Cuántas fugas ha producido la Fuga? ¡La muerte ronda demokrática, incierta y yanquistamente lo puertorriqueño! Pero, ¿qué harás tú, lector? ¿Qué harás ahora con tu nihilismo, con tu apatía, con tu fatiga y con tu complejo? ¿Guardarás tu librito debajo de la fama? ¿Guardarás tu librito hostosianamente en tu suicidio? ¡Pobre de ti y pobre de tu hetera! ¡Pobre también de tu soflama!
[13] Véase los Versos libres.

miércoles, 25 de agosto de 2010

tres poemas de marina centeno

Marina Centeno, Yucatán, México








“me hicieron como el llanto purísimo
como las náuseas y el rencor
como el abandono y la voz de las mendigas”
Efraín Huerta

 
 





 
Posparto
 




 
Reclamo el estertor de los ovarios
su abandono andropáusico
su milicia de caldo al montar escenarios
por el cuarto menguante
que gotea los pasillos en tropiezo y coito
 
Reclamo la habitación del intestino
que alimenta lombrices maliciosas
en blasfemia y sonrisa por los bordes del útero
 
Reclamo el umbral del inicio
Reclamo la espesura del bosque custodiando el ombligo







Adagio a la soledad






Cuando llegue la luz a rasgar el paisaje
reventarán las rosas en la superficie
acontecidas por la soledad
florecer porque sí
entre el bagaje de las estaciones

..y no escuchar más voz que el silencio
arrimado al bullicio
que cimbra las paredes de este encierro
bajo un manto de sombras

Asegúrame que Chopin
llenará de notas la distancia






La profanación
 
 




Cae el abismo por las escalinatas
cuando llega ventisca a profanar la torre

Hieren los besos ocre
y una beata quietud
levanta murallas en el monte

Pincha la luz
donde las mariposas acumulan recuerdos
en migajas de flores y basura de hojas

Un ídolo cae al precipicio
y en el aire el eco se pronuncia
hacia la anchura del camino
que todo lo comprime en estaciones

El futuro resbala hacia lo efímero
al desbarajuste de voces
que ensucian a los siglos

martes, 24 de agosto de 2010

un poema de lia kavaria

Lía Karavia, Grecia








Les vainement suicidés







Pas tous vainement.
Des maladies inguérissables que
les médicament ne peuvent plus alléger.
Des coups durs et de la patience
des coups cruels au-delà de la patience
au-delà du bout du précipice
et au-delà.
Il y a des suicidés dans la Grâce justifiante.
Pas tous.
Il y en a qui n’ont pas patienté
jusqu’au tournant de la rue
peut-être le sifflement du bateau
à l’île du naufrage
et peut-être un oiseau gigantesque mythique
qui allait les mener, les déposer légèrement
à l’autre bout de l’abysse
s’ils avaient patienté un jour de plus
probablement une heure.
Les vainement suicidés.








The ones that vainly kill themselves







Not vainly all of them.
Incurable illnesses that now
no medicines can soothe.
Blows and endurance
blows far beyond endurance
beyond the edge of the ravine
and further.
There are those justified that kill themselves.
Not everyone.
There are those too who could not hold
up to the curve of the road
perhaps the whistle of a boat
passing their shipwreck island
and maybe a gigantic mythical bird
that would carry them to the other end of the abyss
and carefully lay them there
if they had held for one more day
an hour perhaps.
The ones that vainly kill themselves.

Lia Karavia 20 August, 2010








Els suïcidats en va








No pas tots en va.
Malaties incurables que avui
cap medecina no pot alleujar.
Batzegades i resistència
batzegades més enllà de la paciència
més enllà de la vora del precipici
i més enllà encara.
N’hi ha de suïcidi justificat.
No pas tots.
N’hi ha que no han tingut prou paciència
per esperar tombar la cantonada,
el xiulet del vaixell
a l’illa del naufragi
i potser el gegantí ocell mític
que els hauria portat suaument
a l’altra banda de l’abisme
si haguessin aguantat un dia més
fins i tot una horeta.
Aquells que se suïciden en va.

Traduction en Catalan Mateu Turró

lunes, 23 de agosto de 2010

MONÓLOGO DE RAQUEL CUANDO JACOB SE CASÓ CON LEA-Yuslenis Molina

Yuslenis Molina, Cuba









MONÓLOGO DE RAQUEL CUANDO JACOB SE CASÓ CON LEA








Voy a nombrar el pasado
como se nombra un presente.
Un presente que está ausente
porque vive tan aislado,
y no encuentra en mi costado
un pedazo de mentira.
Voy a nombrar a la lira
si entre mis ramas escoge
siluetas, y las recoge
sin la sombra que delira,
porque mentir compra un día
de engaños y de hospitales
se saturan los cristales
sin creer la profecía
lanzada con ironía
por ultravoz, los escombros,
escalo rauda los hombros,
y me lanza meteoritos
sobre esos versos escritos
sin páginas, sin asombros.
Quieren tatuarme la voz
con rayos, con sepultura,
con esa miel que conjura
por siglos, milenios. Dios,
escúchame. Esta tos
de ausencia me deja frío
el nombre. Voy al vacío
por palabras de un ateo…
Quedo trunca y solo veo
todo oscuro en torno mío.



En 1980, un día como hoy, nació en Las Tunas una niña que con el tiempo llegó a ser la escritora y actriz que es hoy Yuslenis Molina, con lauros cosechados y libros dados a conocer. Pero, por suerte, niña no ha dejado de ser. Y ahí está, para confirmarlo, esa payasita que creó para el deleite de los infantes en espectáculos teatrales dedicados a ellos. Por eso, al enviarle un beso de cumpleaños, va también un ruego: Que no deje de seguir sabiendo ser pequeñita, aunque en su poesía para adultos prefiera los rumbos temáticos de las angustias existenciales de este mundo en que vivimos, como puede apreciarse por ejemplo en su ópera prima, el poemario Razón del labio (Editorial Sanlope, 2007).

Yuslenis tiene la curiosa condición de ganadora del Premio Décima al filo en el sexto concurso nacional Ala Décima (2006) y del Premio Ala Décima en el tercer concurso Décima al filo (2007), con su obra Naufragio. Compartimos ahora, con los visitantes a este sitio, otro de sus textos poéticos en estrofas de diez versos.

Cortesía de Pedro Péglez, coordinador de Cuba AlaDécima.

domingo, 22 de agosto de 2010

Encanto del verso-Isbel Díaz Torres

Portada de libro, Cuba








ENCANTO DEL VERSO*
Escrito por Isbel Díaz Torres





[El poeta Díaz Torres escribe este comentario sobre la obra "Cántaro Inverso", de Pedro Péglez González, ]






Soy de los que piensa que los libros de poesía es preciso dejarlos reposar. Esas páginas, si tienen la cantidad precisa de levadura, pueden crecer de modo asombroso o, en caso contrario, sencillamente morir como una libreta mohosa sobre el banco de un parque. Lo primero es lo sucedido con Cántaro Inverso, de Pedro Péglez, cuaderno publicado por la Editorial Sanlope de Las Tunas en el 2005, y cuya relectura después de cinco años de su aparición, ha suscitado en mí la necesidad de estas reflexiones.
De afanoso periodista e historietista, Pedro Péglez González (Ciudad de La Habana, 1945) ha devenido (hace rato) en relator imprescindible del proceso de revitalización de la décima escrita en nuestro país. Más si esto fuera poco, se ha convertido en propiciador y ejecutor a un tiempo, de este “cambio climático” en nuestra estrofa nacional. Es, definitivamente, un poeta de los hondos, de esos cuyos hallazgos estremecen y transforman al que se acerca. Eso ya lo habíamos comprobado en aquel cuaderno que fue un hito para la historia de la décima y la poesía cubanas: (In)vocación por el paria (Premio Iberoamericano Cucalambé de Décima en el 2000). Un libro heterodoxo (según término de César López) en el ámbito de la décima escrita, dotado de una carga tropológica poderosa, y que va de la mano con una “blancura” peculiar.
En Cántaro inverso (Premio Iberoamericano Cucalambé de Décima en el 2004) Péglez mantiene las líneas generales de su estilo, que rompe con el esquema tradicional de la décima y la dota de una morfología caprichosa por momentos, asimétrica en muchos, no obstante persistir una línea comunicacional perfectamente delineada entre el texto y el lector. La polisemia es reina en esto versos, es cierto, ¿pero quién puede decir que eso sea un punto en contra? No hay hermetismo verdadero cuando el espíritu es comunicado.El poeta da cabida a cuanta forma posible encuentra para sus espinelas, si es que se les puede llamar así a estas construcciones. Encabalgamientos, rimas asonantes, metros variados, uso de términos en otros idiomas, versos partidos sorprendentemente que otorgan un sentido “otro” a la idea. Aquí la forma significa, aunque no siempre haya una deliberada intención de significar. El espacio en blanco, el incómodo adelgazamiento del poema, el zigzagueo de la línea morfológica, y sobre todo, aquellos textos donde la estrofa es convertida en un párrafo y la música engañosa de la rima pierde todos sus contornos; logran esbozar la imagen sin abigarramientos ni artificios. Cuando pareciera estar viendo un evidente andamiaje, en realidad descubrimos el objeto “nuevo”. No es el sapo cantando bajo la piedra, sino la piedra que canta.
En Cántaro inverso el autor refuerza su trabajo característico con el intertexto, y constantemente encontramos referencias a mundos imaginarios provenientes de culturas y mitologías disímiles. Así, en la primera de las secciones: Vindicación de la sed, podemos encontrar apelaciones a nombres tales como François Villon, Poe, Cervantes, Maiakovski, Stephan Zweig, Vallejo y Martí. La manera de leer la experiencia ajena (usualmente trágica) e incorporarla como tragedia propia, buscando (o inventando) los posibles vasos comunicantes, va asentándose en estos textos, que prefiguran ya la total asunción de un sujeto-lírico-otro que tendrá lugar posteriormente en Últimas puertas podadas por la nieve (Ediciones UNION, 2005).
La segunda sección del libro: Silencio de la Abadía, es de una gran belleza. Otro universo es recreado aquí. La transmutación de “sufriente que vive en Alamar” a “monje que dialoga con Dios” de tan imposible llega a ser posible. ¿Está enajenado el poeta? ¿Es incapaz de ver su propia realidad circundante? Ciertamente, a veces he extrañado en Péglez esa relación directa con su medio, ese reflejo vívido del entorno social en sus textos. Sartre decía en su famoso texto ¿Qué es la literatura?: El escritor tiene una situación en su época; cada palabra suya repercute. Y cada silencio también. Más no caigo en la demanda ingenua de algunos, cuyas lecturas del mismo Sartre pueden haber sido superficiales. En otra parte del libro citado, el escritor francés nos dice: Si las cosas son así, se comprenderá fácilmente que tontería sería reclamar un compromiso poético. Indudablemente, la emoción, la pasión misma --y ¿por qué no? la cólera, la indignación social o el odio político--, participan en el origen del poema. Pero no se expresan en él, como en un libelo o una profesión de fe. Al menos no siempre, agregaría yo.
La poesía en muchas ocasiones tiene un acercamiento “oblicuo” a la realidad, algo que sucede con muchas de las artes. En ella se llega al conocimiento a través de la intuición y no por vía analítica. Quizás la mira de nuestro autor no está puesta en el “camello” que pasa cada veinte minutos por entre sus persianas, ni tiene por qué estarlo; quizás esté en las columnas de libros y hojas que no dejan espacio libre en su mesa, en su pared llena de retratos y escritos, en las medallas y sables que moldean su soledad. Quizás tampoco esté allí, ni en la abadía, y sencillamente hace preguntas a Dios porque sabe que no se las responderá nunca. Pregunto (Siempre pregunto)/ ¿Quién crucifica este enjambre? Es bastante probable que el anclaje en la realidad debamos encontrarlo nosotros mismos, apretado entre verso y verso, o en el mejor de los casos, inventarlo.
Estas dos primeras secciones son a mi juicio los mejores momentos de Cántaro inverso. La sección que sigue (Que digan que estoy dormido) bien pudiera verse como una continuación de la primera parte, mientras que la última (Feroz la inocencia) incursiona en el mundo de la infancia. Involucrando a gran parte de los personajes fantásticos de la literatura para niños, procedimiento caro a Eliseo Diego, en este caso a mi juicio el discurso se torna un tanto didáctico y no logra cuajar con el cuerpo precedente. Encuentro que esta sección bien pudiera formar parte de un libro diferente, además de que algunos de los textos que la integran quedan un poco por debajo del vuelo poético alcanzado en el resto del volumen.
No obstante, Cántaro inverso es un libro entrañable. Pienso que el autor aquí llevó sus recursos a los extremos: por otra parte, única manera de avanzar hacia nuevos predios. En varias ocasiones he leído a dúo con él el poema que abre y el que cierra este libro (Pre scriptum y Post scriptum), y en los angustiosos emplazamientos del poeta a Peter Pan siempre me parece encontrar otras claves para otras lecturas de este mismo cuaderno.


*Comentario publicado originalmente en "PROYECTO ESQUIFE", Cuba, 2010.

sábado, 21 de agosto de 2010

dos poemas de nieves álvarez martín


Nieves Álvarez Martín, España







Las horas






Se asombra el calendario
de este tiempo de rosas
mientras me balanceo, suspendida
en las horas que pasan, sin sentido.

El impulso no existe,
se ha perdido tras un rumor de abrazos
y sólo las palabras, a lo lejos,
descifran la nostalgia de los días.

Paso a paso, despacio, muy despacio
se va ocultando el sol,
el horizonte
ha ensanchado la línea divisoria
entre el cielo y la tierra;
mientras, cada minuto cuenta,
está contando la historia de un recuerdo,
el almacén sagrado de unos besos,
el árbol que florecerá mañana.

Acaba de apagarse
el sembrador de sueños
mientras canto en silencio una canción
de arena.

Y hay un reloj que marca
el ritmo de mis manos,
y unos versos que dictan el mensaje,
y una voz que no es mía
y que me pertenece.

Y hay un dulce presagio
y un dios de chocolate
y un tiempo de amapolas
en el que fui feliz.



Del libro “Intrusos en el tiempo. Teorema de la lírica”, Primer Premio en el I Premio de Poesía en Castellano Vicente Martín del Excmo. Ayuntamiento de Torrejón de la Calzada (Madrid). 2006. Editado por Vitrubio. Colección Baños del Carmen. 2007






La mujer transparente






Ya doblan las campanas
y una mujer desnuda se reviste
con las mejores ropas que ha encontrado
en el desván del alma.
Ya doblan las campanas
y el silencio
almacena los días
en rosarios de nubes y cuentas de cristal.
Ya doblan las campanas
y la aurora
va dibujando a golpes los paisajes
- de cada despedida transitoria -
con un pincel de plumas y caricias.
Ya doblan las campanas,
la mujer transparente
avanza hacia la luz
para no desmorirse en cada verso,
para no desvivirse en cada voz.

Ya doblan las campanas,
las cigüeñas crotoran en su nido
en la torre más alta de la iglesia
y un mundo de mujer se desvanece
en el árbol azul de una mirada.




Del poemario “Mujeres en la piel de una mujer”, primer premio en el “Concurso de Poesía del Programa Creativ@ 2008: Mujer y Participación Cultural”, organizado por el Excmo. Ayuntamiento de Siero, Asturias.


domingo, 15 de agosto de 2010

Sobre la obra de Alexis Gómez Rosa

Alexis Gómez Rosa, [Revista La otra]


Sobre la obra de Alexis Gómez Rosa


Un texto de Manuel García-Cartagena sobre la obra de Alexis Gómez Rosa y unos poemas de este dominicano.


Alexis Gómez Rosa,
justificadoManuel García-Cartagena


Cada centro empolla el margen que lo destruye


Si no fue el primero, François Villon fue quizás el más original entre los primeros poetas que entendieron que la vida y la escritura no andan por caminos separados, sino que ambas, por una suerte de fatum incomprensible para quienes no hayan tenido la «experiencia de los límites» de la que hablaba Phillipe Sollers, corren parejas por la existencia. este devenir, sin embargo, no siempre ocurre de manera coherente y simultánea: por momentos, la vida personal del poeta puede parecerse a la de un descastado, un ser anómico o anárquico, mientras su poesía parece mirar hacia otra parte. dicho devenir tampoco conduce a ninguna “lección” de tipo moral o existencial: la poesía no “enseña”, no tiene ni ha tenido nunca otra cosa que enseñar que su propia entraña, es decir: la lengua.
Por lo menos en el periodo contemporáneo, todo poema se escribe siempre desde dos márgenes distintos pero no excluyentes entre sí. el primero pertenece al orden de lo temporal: por una parte, el acto mismo de escribir poesía implica la decisión de situarse en un aquí y en un ahora que equivalen a un ser o no ser quien escribe, y en ese dilema hamletiano encuentra siempre el poeta uno de los focos posibles para iluminar alguna de sus múltiples neurosis; por otra parte, la escritura de un poema —por más “automática” o “inconsciente” que se la pretenda—, supone un acto de conciencia por medio del cual el sujeto fija en el discurso lo que en él hay de más radicalmente histórico, es decir su sensibilidad, o mejor dicho, su sens-habilidad, su capacidad de producir sentidos nuevos transformando, destruyendo o combinando sentidos que solo pueden ser anteriores a su práctica de escritura. el segundo margen es de tipo epistemológico y es una consecuencia directa del primero: nadie puede escribir poesía en nuestra época si no sabe de antemano contra cuál de las innumerables tradiciones de escritura se elevará su texto. y ese saber previo deberá estar necesariamente tanto mejor definido cuanto mayor sea la eficacia textual a la que aspire llegar.
Lo anterior, que por razones obvias estaría mejor ubicado en una nota al pie, solo busca situar la doble perspectiva a partir de la cual me acerco aquí a la poesía de alexis gómez-rosa . en primer lugar, le asigno un funcionamiento programático al título del presente libro [marginal de una lengua que persigue su forma, (poemas 2005-2007)], lo cual me permite asumir como hipótesis de trabajo que la “forma” que “persigue” esa “lengua” así nombrada no es otra que la que le da sentido al término “marginal” en y a partir de los trabajos que aquí se reúnen: ya sea por abandono del “centro” o por repliegue hacia la “periferia”, alexis gómez-rosa concentra en este libro una serie de textos en los que lo poético parece resultar de la conjugación ad libitum de dos variables taxativas: la oralidad (memoria, vivencias, experiencias del y con la lengua común) y el estilo (selección, proyecto, intención provocativa, estrategia).
Lo que sigue es, entre otras cosas, un intento de justificación de esta hipótesis.

Margen izquierdo: el problema del tiempo

Desde finales de la década de 1960, Alexis Gómez-Rosa destaca como uno de los poetas más talentosos de su promoción. No exento de polémica, su paso por el grupo “la antorcha”, una de las múltiples formaciones surgidas en la capital dominicana luego de finalizada la guerra de 1965, fue crucial en la construcción de su personalidad poética. sin embargo, aunque ciertas zonas de su producción inicial lo muestran ataviado con la chamarra color caqui del poeta civil que escribió la tregua de los mamíferos , desde el principio de su carrera alexis parece haber venido decantando su memoria líquida en una cantidad casi espasmódica de versos en los que su mirada, como la de un caribeño jano bifronte, vacila entre un aquí y un allá, pero también entre un ahora yun ahorita, es decir, ese illo tempore poetizado que, en el caso de alexis, remite directamente al manejo imaginario del tiempo en la oralidad vernácula dominicana, en la que ese deíctico [ahorita] instaura su ambivalencia característica, la cual lo hace alternativamente equivalente tanto al “hace un rato” como al “dentro de un rato”. como se verá, es, en efecto, de esta suerte de tiempo mítico desde donde la voz poética de alexis gómez parece precisamente emanar en muchos de los poemas de marginal de una lengua que persigue su forma.
No nos avanzaría en nada saber que, en los años 1960-1970, el cara o cruz del quién era quién en la poesía dominicana se decidía de manera tan sumaria y mediocre como ahora, cuando son mayores las apuestas y se pueden comprar menos cosas con las mismas treinta monedas de entonces. lo que sí nos importa es intentar situar el tipo de pacto que el poeta Gómez-Rosa estableció con su contemporaneidad. sobre este particular, como sobre muchos otros, es a su escritura a la que hay que interrogar.
pero ojo: Alexis es poeta como los castores son armadores: su escribir es, en realidad, un re-coger, un re-ciclar, un poner aquí o allí lo que antes (sí, antes) estaba allá, en esa suerte de exilio que es el decir-vivir ajeno. de ahí el carácter radicalmente marginal de ese topos en el cual el poeta se atrinchera espontáneamente para acoger a esa homeless ubicua que es la oralidad. a ese respecto, Plinio Chahín avanza la metáfora descriptiva de la “escucha de voces” que el poeta practica de manera sistemática en su poesía:
«voces malditas o inocentes, víctimas o cómplices, todas ellas van formando el enjambre sonoro, gozoso, oscuro y luminoso de muchos de los poemas de gómez-rosa. poemas que son un conjuro y a la par una obsesión: si gómez-rosa las “escucha” no es para convertirse en esa identidad un tanto pretenciosa que ahora llaman “testigo”, sino por pura fascinación y hasta verdadera identificación» .esas “voces” que el poeta “escucha”, para retomar la metáfora de chahín, postulan la apertura semiótica del texto de gómez-rosa hacia una serie de hipotextos culturales de múltiples tipos, los cuales instauran en funcionamiento del texto una polifonía ambigua y francamente descentralizada respecto al mito decimonónico de la “palabra poética”. así, ni “inspirada”, ni “testimonial”, la producción del sentido en los poemas de Alexis Gómez-rosa parece tender a la re-motivación del lugar común (por extrapolación sintáctica o por resemantización) y a su reubicación en un plano textual con relación al cual sólo puede presentar un funcionamiento abiertamente marginal.
sin lugar a dudas, esto explica al mismo tiempo por qué, en la mayoría de los poemas de este libro, por lo menos, alexis se nos muestra “justificado al margen izquierdo” en plena posesión de una suerte de memoria tribal gracias a la cual el discurso de sus poemas parece concebido para presentar esa triple condición de “lavaje”, “residuo”, “drenaje” y “resaca”, atributos que haroldo de campos le asigna al lenguaje en la cita colocada en exergo en la página 9 de marginal de una lengua que persigue su forma. así, esa cita adquiere, a posteriori (claro está, y como debe ser) un funcionamiento protocolar que nos anuncia y nos prepara para lo que el poeta nos tiene deparado: ese “espacio donde todo es borde” (margen, frontera, orilla) de esquemas múltiples: descriptivo, como en “dominican style”, “daguerrotipo”, “mareante”, “toque barrial”, “parque colón”, etc.; narrativo, como en “ojo en vigilia”, “más ojo que lengua”, “cadete de brillante trompeta”, “bitácora de un corazón en su romanticismo”, “memoria boba”, “pudo acontecer en manhattan”, etc.; discursivo, como en “boquita milk 1”, “boquita milk II”, los dos textos titulados “halterofilia”, “cartelera en un solo acto”, “pareja”, etc. en pocas palabras, textos cuya escritura presupone el mapa dia-lógico del tipo de lectura para la cual fueron concebidos, es decir, textos comunicantes, palabras que buscan comunican un mensaje.
pero, si es así, es decir, si todos y cada uno de los textos que componen marginal de una lengua que persigue su forma evoca o entra perfectamente en la caja vacía (para emplear la vieja metáfora estructuralista) de un estilo que le es necesariamente anterior, cabe preguntarse cuál es el supuesto “margen” en el que el poeta pretende ubicar los textos de este libro.
en lugar de intentar dar una respuesta positiva a esa pregunta, me parece preferible considerarla como una de las incógnitas a las que todo lector de los poemas de alexis gómez-rosa deberá tratar de despejar a su manera. por mi parte, de manera interpretativa, me limito a considerar el ámbito psicológico a todas luces nostálgico que el poeta instaura en la mayoría de los textos que componen este libro como un revelador de su estatuto abiertamente subjetivo (término que aquí equivale casi de manera extensiva a personal).


margen derecho: el problema de la tradición

¿a qué tradición de escritura se oponen los textos de alexis gómez-rosa en marginal de una lengua que persigue su forma? sin lugar a dudas, responder a esta pregunta resulta más perentorio que intentar vincular a dichos textos con esta o aquella otra tradición, no solamente porque dicha operación sugiere la intervención de una consciencia crítica capaz de anular a la consciencia “de archivista” o “de catalogador” que presupone la segunda operación, sino porque, tal vez, esa sería la única manera posible de acceder al sentido de la práctica poética de alexis gómez-rosa en este libro. de todas maneras, lo que importa aquí es ante todo una determinada manera de leer, toda vez que, en poesía, como en la vida, excluir implica siempre incluirse.
apartémonos, pues, de antiguallas como la de la vieja oposición entre una poesía “recitativa” (lírica, épica o elegíaca) y otra poesía “coloquial” (vernácula, repentista o “de ocasión”) y reflexionemos acerca de los referentes poéticos inmediatos en materia de poesía dominicana del siglo XX. sin embargo, no entendamos por esto último la serie de etiquetas que el cada vez más preterido facilismo académico nos impone (postumismo, independientes del 40, poesía sorprendida, generación del 48, generación de los 60, poesía de posguerra, generación de los 70, de los 80, de los 90, etc.), sino a los principales agentes —hombres y mujeres— cuya práctica de escritura marcó de manera polémica el panorama de la poesía dominicana en cada uno de esos períodos.
es desde este punto de vista como podemos aislar, de manera sumaria, dos vertientes de escritura no siempre evidentes en las consideraciones críticas acerca de nuestro discurrir poético dominicano del siglo XX: por una parte, una vertiente a la que llamaré provisionalmente discursiva-reflexiva ante la necesidad de designarla de alguna manera, y que se caracteriza porque propicia la supervivencia del tono ceremonioso, herencia de nuestro modernismo y neoromanticismo tardíos, por el empleo de una sintaxis y de un léxico cultista, en ausencia de toda marca de oralidad y por la puesta en escena de un yo-poético discursivo que medita, reflexiona, evoca o invoca un objeto poético (personal o colectivo). por otra parte, otra vertiente a la que llamaré lúdica-espectacular por la misma razón más arriba enunciada, y que se caracteriza porque presupone la puesta en escena de un yo-poético que (se auto)ironiza, juega, parodia, parafrasea, es decir, se mestiza creando vínculos formales y de sentido entre su voz y las voces ajenas.en su importante ensayo lenguaje y poesía en santo domingo en el siglo xx, diógenes céspedes demostró que, por lo menos en el siglo XX, en la poesía dominicana no hubo una transformación fundamental de la base rítmica de la escritura poética, es decir, nuestros poetas cambiaron la estructura métrica, la disposición de los signos en el espacio blanco de la hoja, practicaron el versolibrismo y ensayaron la introducción de algunos de los procedimientos de la poesía experimental, pero dejaron intacto el ritmo, esto es, la organización general del sentido en el poema.
no es este el lugar para discutir los límites y los alcances de esta reflexión de céspedes. sin embargo hay un aspecto de la misma que importa retener aquí, y es el que se refiere a la necesidad de tomar en cuenta la teoría del lenguaje, de lo histórico, de lo social y de lo antropológico que se desprende de toda práctica poética, toda vez que esta serie de implicaciones resutan cruciales para captar el trabajo del ritmo que desarrolla alexis gómez-rosa en los poemas de marginal de una lengua que persigue su forma.
sin duda debido a su inserción en el núcleo duro de un periodo de la historia sociopolítica dominicana signado por la quiebra de las ilusiones progresistas que vendieron los distintos grupos autodenominados “de izquierda” en los años 1960-1970, la poesía de alexis gómez-rosa aparece marcada por una apertura sui generis hacia el material verbal de origen popular en una práctica de escritura cuyos referentes locales más lejanos remontan a los poemas de rubén suro y manuel del cabral, aunque éstos, a su vez hayan estado marcados por el auge del “negrismo” caribeño de los años 1940-1950.
hoy por hoy, resulta imposible no percibir la oposición crucial que supuso, a mediados de 1940, la escritura de aquellos poemas, llamados “negroides” por la crítica de la época, respecto a la “solemnidad eurófila” ejercida en y desde el poema por los miembros de la poesía sorprendida, fundamentalmente, y junto a estos, por los demás agentes productores de poemas de esa época, incluyendo a los poetas directivos de los cuadernos dominicanos de cultura (tomás hernández franco, héctor incháustegui cabral, rafael díaz niese, emilio rodríguez demorizi, pedro rené contín aybar). independientemente del valor ideológicamente populista que presentaban (y presentan) los poemas del negrismo poético, no debe caber duda de que estos marcaron un punto de ruptura respecto a una tradición de poesía discursivo-reflexiva que ni siquiera —aunque quizás deba decir sobre todo— domingo moreno jiménes había logrado romper.
atisbos de esa ruptura a la que me refiero podemos encontrarlos en la obra de dos poetas de los años 1960-1970: apolinar núñez y alexis gómez-rosa, y en la de otro poeta de los años 1970-1980: pedro pablo fernández. un detalle común a los tres es que abordan en sus obras el espacio del poema desde una perspectiva lúdica donde el humor y la parodia desarticulan de manera sistemática las estrategias convencionales que suelen inocular en el poema las líneas de escritura discursivo-reflexiva. sin embargo, mientras núñez y fernández desarrollan una escritura sintética —casi aforística, en el caso del primero; sintáctica y semánticamente desarticulada en el caso del segundo—, alexis gómez-rosa se decantó por un tipo de escritura basado en la elaboración de símbolos semioculturales por medio de una referencia sistemática a diversos tipos de instancias de la cultura oral.como en la mayoría de sus poemarios anteriores, el registro poético que alexis gómez-rosa emplea en marginal de una lengua que busca su forma se nutre del fondo común de mensajes oriundos de la mixtificación comunicativa característica de los años 60-70: algunos retoman frases claves de programas radiales o televisivos que marcaron aquella época, como es el caso del mensaje: «[¿]se han preguntado ustedes dónde estarán sus hijos?» (“Cartelera en un solo acto”, p. 28) o la referencia a la «Cabalgata Deportiva Gillette» (“Pareja”, p. 29); unos pocos tienen por referentes a instituciones pertenecientes al universo sociocultural fijado en el imaginario epocal por los media: Los Carmelitas de San Luis (p. 29), Radio Guarachita (p. 32) o el siguiente, abierta parodia a la fraseología típicamente publicitaria: «Con el patrocinio de la mejor cerveza, el verdadero sabor / y el inestimable apoyo del banco de Reservas, damos a ustedes las gracias por su presencia en esta / colosal / superproducción» (p. 99); otros proceden de las letras de canciones igualmente asociadas al imaginario epocal («Por ahí María se va, dicen los niños» (p. 46); otros, incluso, anclan de manera referencial en una nómina sucinta de personajes más o menos identificables para el lector medianamente culto, ya sean estos extranjeros (Kurt Schnitzer, Marlene Dietrich, Chillida, Roman Polansky, [el Che] Guevara, André Breton, o dominicanos (Andrés L. Mateo, Luis Díaz, Duluc, [iván] Tovar, Soucy [de pellerano], Cunito Cabral, Juan Marichal, etc.
el empleo sistemático de esta estrategia de parodización o de carnavalización de la cultura popular en el poema constituye sin duda alguna el punto de encuentro entre la poética de alexis gómez-rosa y el proyecto de escritura beat, principalmente el de allen ginsberg y el de lawrence ferlinghetti («en el camino de la beat generation / rumbo a San Francisco, / hice una parada de almuerzo desnudo / frente a la inmensa bahía / gaviotas blancas y grises. / supe que Ferlinghetti habló / de Juan Marichal: / formidable lanzador de alta pierna y / bolas de humo: / lanzador de un gran screw ball.» “Gas station”, p. 123). en mi opinión, más que al estilo y mucho más que a la cita o al referente cultural, dicho encuentro se atiene de manera fundamental a la teoría de lo social que se desprende de la práctica de escritura que desarrolla alexis gómez-rosa en sus poemas, y en particular, de la imagen del lector que estos construyen, el cual aparece como un lector cómplice que, en su caso, es convocado por ese Yo-poeta que disemina fuertes dosis de su memoria histórica en sus poemas y que, de manera sintomática, interpela constantemente al Tú-lector llevándolo a rememorar, junto a él, el conjunto de marcas referenciales a través de las cuales el texto del poema se convierte en una suerte de re-vista o re-visión de la cultura popular (hispano)americana de los años 1960-1970.
siendo este recurso de la construcción de un destinatario cómplice una de las características principales de los textos de gran consumo propios de la cultura popular entre los cuales cabe citar, en primer lugar, la letra de las canciones como las de la salsa, los tangos, los merengues, los boleros, etc.), la construcción del “margen” comunicativo en el que se atrinchera el yo-poeta alexis gómez-rosa para enunciar los poemas de este libro pone en marcha un doble proceso de inclusión-exclusión. incluyente: su práctica de escritura convoca un tipo de lector capaz de reconocer y de validar el conjunto de marcas referenciales de eso a lo que podemos llamar la memoria generacional del poeta. excluyente: esta misma estrategia de escritura confina de manera indirecta al sector del público incapaz, por razones de edad, de asumir como suyas esas huellas mnemóticas. así enmarcada entre un movimiento simultáneamente sistólico-diastólico, la escritura de alexis gómez-rosa puede alternativamente “llenarse” y “vaciarse” de sentido, según quienes la lean.

alexis gómez-rosa, justificado

la selección de poemas que alexis gómez-rosa nos entrega en marginal de una lengua que persigue su forma (poemas 2005-2007) constituye una excelente muestra del arsenal de técnicas y estrategias de escritura acrisoladas por quien merece ser considerado uno de los mejores exponentes de la poesía dominicana contemporánea. sin alardes ni extravagantes discursos propios de saltimbanquis, su poesía busca romper aquí con ese falsamente pomposo discurrir pseudopoético que, a fuerza de situarse lo más lejos posible de su público, termina siempre “confirmando” la mentira de la “muerte de la poesía” que propagan urbi et orbi los libreros y mercachifles incapaces de entender que, tanto en la literatura como en la vida, lo único que conviene matar es nuestra humana capacidad para intentar analogar aquello que es a todas luces espurio y falso con lo que solo puede ser el resultado de un trabajo intelectual honesto y depurado.
Quizás pensando en esta parte sombría del actual panorama de las letras, alexis gómez-rosa escribió estos versos que, desde mi punto de vista, justifican tanto su posición estética en estos poemas como su posición política ante la vida:«Lo que importa es desatar los demonios.
Andar ligero de conciencia y no enchivarmecomo el poema anterior: terreno duroy de abecedario difícil, algo asícomo si me corrieran en el bustrófedon […]»(“Justo antes de comenzar”, p. 129)

manuel garcía-cartagenasanto domingo, el 20 de febrero de 2009


*Fotografía y textos enviados por Alexis Gómez Rosa y publicado en Revista “La otra”, revista de Poesía, número 41, agosto de 2010, dirigida por José Ángel Leyva. El texto es conforme su publicación original.

sábado, 14 de agosto de 2010

un poema de Üzeyir Lokman ÇAYCI


Ilustración de Üzeyir Lokman ÇAYCI


Kendileri çalıp, kendileri oynayanlar





Etliyle… sütlüyle… tatlıyla beslenenler
Bilemezler senin kıymetini.

Taş çatlasa da onlara açtıramazsın
Çiftliklerinin pencerelerini…
İlgi alanlarında senin gibiler yok
Sen yoksun…
Bunu anlamalısın artık
Zaman ayıramazlar sana!

Onların gözleri hep yukarılarda
Bel büküp
Gerdan kırarken
Padişaha... sultana
Seni tanırlar mı hiç?

İşin aslını sorarsan
İplerinin uçları
Başkalarının ellerinde
Onların kendilerini kral zannetmelerine
Sen hiç aldırma!

Boş umutlarla
Yersiz beklentilerle
Seni insan yerine
Koymalarını bekleme...

Kapalı kapıların adamlarına
Yüzlerce mektup yazsan
Görüşmek ya da konuşmak istesen
Tek bir cevap dahi alamazsın...
Aman ha dikkatli ol
Üstüne üstlük
Şımartırsın onları
Kendilerini bir şey zannederek
Tepeden bakarlar sana!

Onlar birbirlerinin sırtlarını
Sıvazlamayı severler…
Sana sadece
Konuştuklarını "imrene imrene" dinlemek
Yazdıklarını "göklere çıkararak" övmek
Yaptıklarını "alkışlarla" ödüllendirmek düşer...

Zaman kaybedip
Başka şeyler düşünerek
Kendini oyalama.

Üzeyir Lokman ÇAYCI
Paris, 20.06.2007





Ceux qui dansent au rythme de leur propre musique




Ceux qui se nourrissent de viandes…de produits laitiers…de desserts
Ne peuvent t'estimer à ta juste valeur.

Même si la pierre se fendait, tu ne peux pas leur faire ouvrir
Les fenêtres de leur ferme…
Des gens comme toi ne font pas partie de leur centre d'intérêt
Tu n'existes pas…
Dorénavant tu dois savoir
Qu'ils n'ont pas de temps à te consacrer!

Ils ont les yeux fixés toujours vers le haut
Pendant qu'ils s'inclinent
Avec un sourire au dessus de leur double menton
Devant le souverain… le sultan
Crois-tu un seul instant qu'ils te reconnaissent?

Si tu me demandes mon avis à ce sujet
C'est que les bouts de leur ficelle
Sont aux mains d'autrui
Ne te formalise point du fait
Qu'ils se prennent pour des rois!

Avec des espoirs vains
Et des attentes mal placées
N'attends pas d'eux
Qu'ils te considèrent comme un homme…

Même si tu écris des centaines de lettres
Aux hommes des portes fermées
Dans le but de les voir ou de leur parler
Tu ne recevras même pas une seule réponse…
Méfie-toi, sois attentif
Par-dessus tout
Tu leur permettras d'avoir des airs hautains
En se croyant importants
Ils te regarderont avec dédain!

Ils aiment bien se caresser
Le dos les uns des autres…
Il ne reste plus
Qu'à écouter leurs conversations "avec admiration"
A vanter leurs écrits "exagérément"
A récompenser leurs faits "par applaudissement"…

Ne perds pas de temps
Et ne t'occupe pas
En pensant à autres choses.

Üzeyir Lokman ÇAYCI
Paris, le 20.06.2007
Traduit du turc par : Yakup YURT ©




Those who dance to the rhythm of their own music





Those who nourish themselves on meats, dairy products and desserts
Cannot estimate you at your fair value.

Even if stone cracked, you cannot make them open
The windows of their farm …
People like you are not included in their center of interest
You do not exist …
Hereafter you must know
That they do not have time to bless you!

Their eyes are always fixed from above you
While they bow
With smiles above their double chins
Before the sovereign...the sultan.
Do you think for an instant that they acknowledge you?

If you ask my opinion on this subject
It is because the ends of their twine
Are in the hands of other people.
Don't take exception to the fact
That they are taken for kings!

Do not wait for them
In the wrong places
Vainly hoping
They will consider you a man …

Even if you write hundreds of letters
To these men of the closed doors
Intending to see or speak to them
You will not receive a single response …
Be wary and attentive;
Above everything
Allow them their haughty airs.
By thinking themselves important
They will look at you scornfully!

They well like fondling
Each others' backs …
It is no longer to the point
To listen to their dialogues "with admiration"
To extol their writings "enthusiastically"
To reward their facts "by clapping" …

Do not waste your time
Or put your attention here …
Think of other things.
by Uzeyir Lokman CAYCI
Paris, 20.06.2007
Traduit par by Yakup YURT en français
French free verse translated into English free verse
by Joneve McCormick



Chi danza al ritmo della sua musica

Chi mangia carne.... derivati del latte e dessert
non può apprezzare il tuo valore
Anche se la pietra si incrinasse
tu non potrai far aprire finestre alla loro durezza di cuore
Persone come te non fanno parte
dei loro interessi
tu non esisti
d'ora in poi devi sapere
Che non hanno tempo da dedicarti!
Hanno gli occhi sempre rivolti verso l'alto
Mentre s'inchinano
con un sorriso sotto il loro doppio mento
davanti al potente.... il sultano
Per un solo momento credi ti riconoscano?
se mi chiedi al riguardo un parere
è che i i fili dei loro destini
sono nelle mani di altriNon ti formalizzare
che si considerino dei re
Con vane speranzee aspettative mal riposte
non pensare che ti considerino come uomo
Anche se tu scrivi centinaia di lettere
agli uomini dagli animi chiusi
con l'intento di di vederli ,di parlar loro
Non riceverai una sola risposta
Diffida, stai attento
soprattutto gli permetterai di avere un aria altezzosa
credendosi importanti
ti guarderanno con sdegno!
Amano carezzarsi
l'un l'altro le schiene
Non rimane che
ascoltare ammirati le loro conversazioni
magnificare i loro scritti
gratificare le loro azioni
con applausi
non perdere tempo
non occupartene....
Pensando ad altre cose.
Üzeyir Lokman ÇAYCIParis, 20.06.2007Traduit du turc par : Yakup YURT ©libera traduzione italiana di Arturo Ferraraper QDA © lab artfer Torino

miércoles, 4 de agosto de 2010

un poema de segundo antares

Segundo Antares, Chile






Retrato de mis zapatos






Mis zapatos no son grandes ni chicos;
caminan esquivando las líneas de la vereda;
son algo infantiles en su andar;
me llevan donde ellos quieren llevarme,
sin mucha premura,
pero no por ello lentamente;
dan pisadas firmes y seguras en el suelo
y chapotean inseguros en el agua;
están gastados y cansados por el uso,
pero no por eso demuestran menos vigor al correr;
son una prolongación de mi pensamiento
y son compañía y abrigo de mis pies vírgenes;
están muy sucios en la suela
y brillan en las puntas
como un auto recién lavado;
caminan conmigo desde que me los puse
y morirán cuando me los saque.

lunes, 2 de agosto de 2010

un poema de franzisco yutzil AZUELA ERAZO


Franzisco Yutzil AZUELA ERAZO, México-Honduras







SOLO EN VIDA ESTOY MURIENDO







Mentiras la vida no es corta,
es tan larga,
mis ilusiones en un reloj sin baterías aumentan la carga,
el corazón guarda no por mucho tiempo,
también se cansa,
el misterio avanza
y siento que la oscuridad me llama,
si no descanso con venganza.
¿Dónde estás, dónde estás ?
en un cuarto de tortura como Alcatraz,
ojos que utilizo como antifaz,
¿Que será ?, ¿que será de nuevo ?
, ya no puedo porque tengo miedo,
mi único deseo en mi testamento es un beso
para olvidar que soy un reo.
Teclados,
cintas en el estudio haciendo melodías,
esta no es la quinta vez que estoy agobiado
y que lo expreso con mi tinta,
grabo mis recuerdos,
parto el sabor de mi familia como niño eterno,
las paredes son mi cárcel,
hay testigos de una historia ya escrita.
Tengo cosas que me incitan a hacer otras cosas no bonitas,
ya está abierta mi cripta junto a unas flores ya marchitas,
me consuela una cita con la chica que desprecio,
sigo siendo un necio,
se acabó la sesión y la reunión de sentimientos
que no se van con el viento ni las cura el tiempo,
miseria y mi aliento asquiento de realidades no contento,
cruzando caminos a paso lento.
¿Que será ?, ¿que será ?,
ojalá no sea la pubertad,
de todas maneras no hay marcha atrás en la mentira,
``Porque con ella puedes ir muy lejos pero sin esperanzas de volver``
Todo el mundo sufre,
bañados por corrientes de ríos de azufre,
si me niegan que use la imaginación por un momento te la puse.
Así es como sucede,
siempre un cuerpo caliente
y una habitación inocente,
observando cómo me transformo
en un monstruo de repente.
Hablo tanto de la mente pero no la controlo,
se fuga,
soy un bolo sin arrugas para olvidar mis pruebas duras,
pura basura es lo que miro,
no me pego un tiro porque hay peores que yo en Honduras,
ya no aguanto,
adiós amigo,
mi destino es la pregunta.
San Pedro Sula, Honduras, 8 de marzo de 2005

El poeta Azuela Erazo, es hijo de Francisco Azuela, amigo éste último y prologador de uno de los libros de poesía de André Cruchaga, editado en México, "Caminos cerrados". Si usted desea leer más poesía de este joven ingrese al índice general de Arte Poética- Rostros y Versos.